Aunque
no sintamos nada estamos girando sin parar.
La
tierra gira sobre si misma por el movimiento de rotación.
Para
dar una vuelta entera, la Tierra necesita 24 horas.
La
rotación y la inclinación de la tierra hace que los rayos del sol no lleguen al
mismo tiempo a todas las partes del planeta.
Hay
una parte que recibe los rayos del sol, decimos que es de día y la parte que no
recibe los rayos del sol, decimos que es de noche.